martes, 8 de noviembre de 2011

Beso comprimido





Hoy, cerré los ojos entre suspiro y respiro, comprimiendo un beso entre la ausencia y el olvido.

Hoy, soñé con tu cabello cabalgando la brisa en la tarde de un silencio, mientras la pasión soñaba que podía amarte, entre tu aroma y el recuerdo.
Hoy, la boca suspiró tu nombre entre la angustia y el anhelo… susurrando caricias mientras la piel esperaba por tu encuentro.

Hoy, la mente dormía, el cuerpo se regocijaba en el descanso, mientras el espíritu  interrogaba al corazón… preguntando por ti.

Un beso comprimido entre pecho y alma, un suspiro volador que salió de ti y aun no llega a mi, para llenar mi vida con tu aliento, para saber cuanto te necesito.

Hoy, el universo se incapacitó, el espacio del tiempo colapsó al perderse entre segundos que nunca se fueron.

Hoy, me enamore de ti, del rastro de tu sombra al caminar aun cuando la noche no deja luces que te puedan tocar.

De tus labios, custodios de tu boca al generar besos que culminen en pasiones que para luego no quiera controlar.

Hoy, me enamore del aliento que desprenden tus suspiros, del misterio de la atracción y la ciencia que los estudia, me enamore de tu clandestinidad en pleno medio día, justo cuando el sol arropa tu piel y dibuja tu silueta sobre ti misma.

Hoy, simplemente decidí que seria un alma plena, una exhalación que se comprima en tu aliento…

solo para nunca dejar de amarte.



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